En una nota publicada por el diario Clarín, el embajador de Azerbaiyán en Argentina, Mammad Ahmadzada, declaró que Armenia tiene un "régimen represivo de dictadura militar-oligárquica".
"Azerbaiyán apuesta a la guerra y desprecia la paz. La carrera armamentista a la que se ha lanzado y la agresividad e intolerancia de sus diplomáticos presagian lo peor", expresó Mario Nalpatian, vicepresidente de la Internacional Socialista y miembro del Consejo Nacional Armenio Mundial.
"Armenia transita hacia una democracia parlamentaria con vigencia de derechos y garantías. Azerbaiyán retrocede cercenando estos derechos, resultado de una dinastía autocrática y opaca", agregó.
La opinión de Ahmadzada se emitió en respuesta a una nota del periodista Marcelo Cantelmi, jefe de politica internacional de Clarín, que según Ahmadzada "refleja opiniones no objetivas y representa la posición de Armenia". Cantelmi ya había sido víctima de las persecuciones del gobierno azerí en agosto del 2013, cuando se conoció que Azerbaiyán lo añadió a una lista negra y le prohibió la entrada al país por cubrir el conflicto en Karabaj.
Ahmadzada también culpó al gobierno armenio de "dirigir la atención hacia la zona del conflicto, a fin de tranquilizar las amplias protestas de la oposición", algo que justamente los organismos internacionales de derechos humanos señalan como una de las políticas del propio gobierno azerí.