La Cámara de Representantes de Bélgica reconoció el Genocidio Armenio el jueves 23 de julio, luego de una sesión plenaria en la que fue aprobada el proyecto por mayoría.
Según informó European Armenian Federation for Justice and Democracy (EAFJD), organismo que nuclea a las sedes europeas del Consejo Nacional Armenio, todos los representantes de los partidos condenaron el genocidio perpetrado por Turquía y subrayaron la necesidad de que el gobierno turco reconozca el crimen.
"El Poder Ejecutivo y los legisladores belgas resistieron las presiones e incluso amenazas de la comunidad turca local y de las autoridades de Ankara", informó Mario Nalpatian, vicepresidente de la Internacional Socialista y miembro del Consejo Nacional Armenio Mundial, al ser consultado por Prensa Armenia. "Se completó el camino iniciado por la Cámara de Senadores en 1998, seguido por el primer ministro Charles Michel el 18 de junio de este año quien lo reconoció en una declaración oficial".
La resolución fue presentada por el diputado Peter De Roover y aprobada por la Comisión de Relaciones Exteriores a principios de julio. El Senado belga ya había reconocido el Genocidio Armenio en 1998. En junio pasado, el primer ministro belga, Charles Michel, reconoció el Genocidio Armenio en un discurso ante el Parlamento. En su discurso, De Roover expresó su solidaridad con el pueblo armenio y pidió a las autoridades turcas que terminen con la política de negación.
La resolución cita como fundamentos a la Convención de 1948 de las Naciones Unidas para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, así como también el reciente reconocimiento del Parlamento Europeo en abril. "Cada vez más Estados miembros de la Unión Europea, Parlamentos nacionales y Parlamentos de las entidades federales reconocen el Genocidio Armenio perpetrado en el Imperio Otomano como un hecho histórico", se lee en la resolución.
Además, la Cámara de Representantes "alentó" a Turquía a "aprovechar la oportunidad que ofrece la celebración del Centenario del Genocidio Armenio para llevar a cabo nuevos esfuerzos con el fin de hacer frente a su pasado, incluyendo la apertura de sus archivos, para reconocer el Genocidio Armenio y allanar así el camino para una verdadera reconciliación entre los pueblos turcos y armenios".
De todas maneras, la resolución dice que Turquía "no puede asumir la responsabilidad histórica y moral de la tragedia de los armenios en el Imperio Otomano", párrafo que fue ampliamente criticado por la comunidad armenia de Bélgica según el diario RTL.
"Turquía ha sido acusada injustamente por una vez más", se apresuró a declarar la Cancillería turca. Según una declaración emitida horas después de que se conoció la noticia, para la diplomacia turca la resolución belga "constituye el último paso" de "una campaña para empañar la identidad turca y la historia".
"Es difícil comprender que en un período en que Europa se enfrenta a serios desafíos como la crisis económica, la Cámara de Representantes dedique sus esfuerzos, necesarios para garantizar el bienestar de sus ciudadanos, en una cuestión extranjera", sobre "la que no existe un consenso histórico, jurídico, académico o político", agregó el comunicado.
Desde la Cancillería armenia, por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores, Edward Nalbandian, dijo que la resolución "completa el proceso de reconocimiento del Genocidio Armenio por Bélgica", haciendo referencia al reconocimiento previo por parte del Senado. "El reconocimiento incondicional del Genocidio Armenio por las autoridades legislativas y ejecutivas del Reino de Bélgica es encomiable", destacó Nalbandian.